Comprar un vehículo en una subasta puede implicar varios gastos adicionales más allá del precio de la apuesta. Matus International te trae esta lista de los costos que debes tener en cuenta:
Precio de la apuesta: Este es el costo base que pagas por el vehículo en la subasta. El precio dependerá de la cantidad de apuestas que se hagan en la subasta en vivo o si el vehículo está en precio de compra rápida.
Tarifa de la subasta: La mayoría de las subastas cobran una tarifa de comprador (fee), que puede ser un porcentaje del precio de la apuesta o una tarifa fija.
Costos de almacenaje: Si no puedes recoger el vehículo dentro de los días que da la subasta para retirar, es posible que debas pagar por el almacenamiento. Recuerda que debes coordinar tu recolección con Matus International al momento que lo ganes, de esta manera evitarás el almacenamiento y ahorrarás dinero.
Costo de grúa: Los precios pueden variar dependiendo de la ubicación de la subasta y el destino hacia donde lo deseas trasladar. Toma en cuenta que los precios cambian tanto por el tamaño y el tipo de vehículo.
Costos de transporte: deberás considerar el costo de transportarlo desde la ubicación de destino (California o Florida) hasta el puerto o almacén fiscal de tu preferencia de tu país de destino. Los precios pueden cambiar dependiendo del tipo y el tamaño del vehículo.
Reparaciones y mantenimiento: Los vehículos comprados en subastas, especialmente los que tienen daños o que han sido vehículos de salvamento, pueden necesitar reparaciones significativas. Es importante que tomes en cuenta dentro de tu presupuesto estos gastos, de esta manera podrás garantizar que tu inversión genere ganancias.
Costos aduanales y papelería: en este caso debes tomar en cuenta los impuestos que debe pagar tu vehículo por ingresar al país de destino, así como también los costos de papelería y los trámites aduanales, esto para que puedas retirar el vehículo del almacén fiscal.
Amigo importador, todos estos gastos te ayudará a calcular el costo total de la compra y evitar sorpresas financieras. Es una buena práctica presupuestar un margen adicional para estos gastos y asegurarte de que la compra sea financieramente viable. Recuerda que tu negocio crece más con Matus.
Comentários